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Guía para hombres que apoyan la igualdad
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Hoy queremos dedicar este correo a ellos: A los hombres que trabajan con mujeres, que son liderados o las lideran, que las acompañan, que las siguen, que las admiran y también quieren formar parte del cambio.
En Atenea Network creemos que la paridad no es un objetivo solo de mujeres, sino una tarea compartida. Alcanzarla requiere aliados: hombres que cuestionan estereotipos, impulsan la equidad en sus equipos y se comprometen con el desarrollo del talento sin importar el género.
Por eso hoy compartimos una guía práctica con siete formas en las que los hombres pueden convertirse en aliados reales de las mujeres dentro y fuera del trabajo.
💌 Tenemos pocos suscriptores hombres, pero queremos llegar más lejos. Te invitamos a reenviar este correo a tu amigo, colega, pareja, subordinado o jefe que quieres que se sume a la conversación. Y si tú eres ese hombre, sé parte del cambio: suscríbete a Girl Morning y únete a Atenea Network.
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Guía práctica:
7 maneras de apoyar la igualdad
1. Desafía la “penalización por simpatía”
Cuando un hombre tiene éxito, suele ser más apreciado. Cuando una mujer lo tiene, muchas veces es vista como “mandona” o “difícil”.
Este doble estándar erosiona su crecimiento profesional.
¿Qué puedes hacer?
Cuando escuches comentarios como “es muy agresiva”, pregunta: “¿Dirías lo mismo si fuera un hombre?”
Reflexiona también sobre tus propias percepciones y evita juzgar con base en estereotipos.
Dato: Las mujeres reciben con más frecuencia comentarios o calificativos como “intimidantes” o “demasiado agresivas” al negociar.
2. Evalúa el desempeño de manera justa
El rendimiento masculino se sobreestima con frecuencia, incluso desde la infancia. Las evaluaciones basadas en intuición suelen perpetuar desigualdades.
¿Qué puedes hacer?
Define criterios claros, medibles y compartidos para evaluar al equipo.
Cuando todos saben qué significa “excelencia”, las oportunidades se equilibran.
Dato: Cambiar un nombre femenino por uno masculino en un currículum puede aumentar un 61 % las probabilidades de contratación.
3. Da crédito a las mujeres
Las mujeres suelen ser infravaloradas y tienden a atribuir su éxito a la suerte o al esfuerzo, no a su talento.
¿Qué puedes hacer?
Reconoce públicamente sus logros. Si alguien minimiza sus capacidades, destaca los resultados que las respaldan.
Y cuando una mujer dude de postularse, recuérdale que está lista.
Dato: Los hombres aplican a un empleo si cumplen el 60 % de los requisitos; las mujeres esperan cumplir el 100 %.
4. Aprovecha al máximo las reuniones
En muchas reuniones, los hombres hablan más, interrumpen más y reciben más crédito por las ideas.
¿Qué puedes hacer?
Invita activamente a las mujeres a participar, evita las interrupciones y reconoce las ideas que ellas propusieron primero.
Asegúrate de que se sienten al frente y tengan voz.
Dato: En equipos pequeños, dos o tres personas generan más del 60 % de los comentarios; la mayoría suelen ser hombres.
5. Comparte las “tareas domésticas” de oficina
Organizar reuniones, tomar notas o recibir a nuevos empleados no debería recaer siempre en las mujeres. Son tareas invisibles que consumen tiempo y limitan su exposición a proyectos estratégicos.
¿Qué puedes hacer?
Distribuye equitativamente estas responsabilidades y ofrece voluntariamente asumir algunas.
Evita caer en la trampa de esperar que las mujeres “cuiden” del equipo.
Dato: En evaluaciones de desempeño, los hombres que ayudan son mejor calificados que las mujeres que hacen exactamente lo mismo.
6. Haz que el trabajo funcione para los padres
El sesgo contra las madres —y también contra los padres que se involucran en la crianza— sigue siendo fuerte.
¿Qué puedes hacer?
No asumas que las mujeres con hijos rechazarán desafíos.
Habla abiertamente de tu propio equilibrio entre trabajo y familia y apoya políticas de paternidad compartida.
Dato: Un simple “miembro de la junta de padres y maestros” en un currículum redujo en 79 % las posibilidades de que una mujer fuera contratada.
7. Sé mentor y abre espacios
Las mujeres reciben menos mentoría y patrocinio que aceleren su crecimiento.
¿Qué puedes hacer?
Ofrece mentoría real: comparte tu experiencia, recomienda candidatas para puestos de liderazgo, preséntalas en tus redes.
No excluyas a las mujeres de eventos o reuniones informales: las oportunidades también se construyen fuera del escritorio.
Dato: Los hombres que patrocinan a mujeres talentosas también avanzan más rápido en sus propias carreras.
Ser aliado no significa hablar por las mujeres, sino escuchar, aprender y actuar con coherencia.
Cada gesto cuenta, y cuando los hombres y las mujeres trabajan juntos con equidad, las organizaciones prosperan.
🌐 Si crees que el cambio empieza contigo, comparte esta guía, invita a un hombre a suscribirse y afíliate a Atenea Network.
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